El engaño de los productos light: ¿Adelgazan los productos light?
Se denomina light o «ligero» a los productos cuyo valor energético ha sufrido una reducción de al menos un 30% del producto de referencia, siempre y cuando pueda acreditarse la existencia de productos de referencia en el mercado
El engaño de los productos light es muy sencillo explicar con una única frase categórica: Los productos light suelen tener cantidades similares de azúcar que las versiones de referencia y engordan igual; por lo tanto no ayudan a adelgazar. Cada vez con más asiduidad médicos, nutricionistas y expertos del mundo de la salud, avalados por estudios profesionales contrastados, confirman que lo que se esconde detrás de la epidemia mundial de obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer, es el consumo excesivo de azúcar (y no de grasa).
Actualmente estamos viviendo el boom de los productos sin grasa. La industria alimentaria mete en el mismo saco las grasas saludables (grasas saturadas) y las grasas trans o hidrogenadas (las que realmente debemos evitar). Lo cierto es que la industria alimentaria está “en guerra” contra las grasas (las grasas son el demonio!!) y NO contra el azúcar ¿por qué? Porque el azúcar es muy barato y además es adictivo, lo que se traduce en ventas y más ventas. ¿Quién querría cambiar esta fórmula?
El engaño de los productos light: Menos grasas, menos calorías, ¿más saludables?
Existen estudios que revelan que el consumidor tiene una percepción errónea y se siente atraído por la distinción de “light”, tendiendo a consumir en mayor cantidad estos productos creyendo que son más saludables. Normalmente, al reducir la cantidad de grasa en un producto, éste pierde parte de su sabor y… ¿sabes lo que le suelen echar para que sepa mejor? Más azúcares, sal y almidón.
Si estás familiarizado con los artículos de este blog y con la filosofía de OutletSalud, ya habrás podido leer en más de una ocasión estas dos afirmaciones de vital importancia y que todo el mundo debería conocer (normalmente nadie nos lo explica, las empresas alimentarias aún menos). Son afirmaciones totalmente contrarias a lo que promulgan estos productos light:
- El consumo de grasas es necesario para vivir. Siempre hemos pensado que las grasas son malas, pero en realidad es todo lo contrario, las grasas son buenas en su proporción adecuada y si eliges las correctas, son imprescindibles para vivir y además, aunque suene extraño, ayudan a adelgazar. Como hemos indicado anteriormente y explicamos en este otro artículo, las grasas peligrosas son las grasas trans o hidrogenadas, cuyo consumo debemos evitar por todos los efectos negativos que tienen en nuestra salud.
- Las calorías de un producto no es lo más importante. No todas las calorías tienen el mismo comportamiento en nuestro cuerpo, por lo que detente a mirar más los nutrientes que tenga el producto y menos las calorías (no tiene el mismo valor energético las calorías de las proteínas que las de los carbohidratos o las grasas, no es lo mismo 100 calorías de galletas que 100 calorías de un filete de atún).
El engaño de los productos light: La trampa de la industria alimentaria
Quizás aún haya algún incrédulo que piense que la industria alimentaria antepone la salud de sus clientes ante todas las cosas. Pues no, claro ejemplo de ello es su juego interesado y las artimañas que inventa para colar como light aquello que no lo es y el tratar de confundirnos con la intención de hacer caja:
- Muchos de los productos no llegan al 30% de reducción de los valores originales, sin embargo siguen en las estanterías de los supermercados vendiéndose como light.
- Muchas veces, las empresas optan por sacar porciones más pequeñas para que tengan menos calorías que las versiones originales, indicando que se trata de un producto «light».
- En multitud de ocasiones, las empresas sustituyen el azúcar por otros ingredientes con nombres diferentes pero que tan solo son sinónimos de azúcar (le añaden siropes y jarabes de glucosa y fructosa, entre otros). Esto hace que al leer la etiqueta pienses que la cantidad de azúcar es menor (los azúcares están divididos en varios componentes cuya suma total es elevada).
- Está permitido poner que un producto tiene 0% de grasas trans cuando éstas no superan los 0,5 gramos de la porción.
El engaño de los productos light: La guerra contra el azúcar
La guerra contra el azúcar y, sobre todo, contra el azúcar oculto presente en infinidad de productos que se encuentran en todos los supermercados, no ha hecho más que empezar. Es cuestión de tiempo (por desgracia ocurrirá más tarde que pronto, es complicado cambiar los dogmas) el que la conciencia mundial cambie, lo cierto es que no será nada fácil ya que son las grandes industrias alimentarias a nivel mundial las que están detrás del negocio del azúcar y quienes realmente deberían iniciar esta revolución, algo que hoy en día no están haciendo ni se vislumbra que lo hagan a corto plazo porque no les interesa. Del mismo modo y para más inri, como ya hemos indicado anteriormente sobre los engaños que hace la industria, éstos son permitidos porque no existe ninguna ley a nivel internacional que regule el uso del término light. Esto facilita aún más la prostitución y el uso de este indicativo sin miramientos.
El engaño de los productos light: Qué podemos hacer como consumidores
Desde OutletSalud te aconsejamos que antes de dejarte seducir y caer en las garras de los sugerentes productos light, leas los valores nutricionales que aparecen en la etiqueta y los compares con sus versiones de referencia, será la única forma de que no te engañen.
¿Conocías el engaño de los productos light? ¿Consumes productos light de forma periódica? Cuéntanoslo en los comentarios.
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